Evocando leyendas divinas
ENTREVISTA CON EL COREóGRAFO GU YUAN
En cada ensayo, sus ojos atentos repasan todo el escenario. Presta atención a cada detalle, desde los bailarines a los accesorios que utilizan, desde la pantalla de fondo al foso de orquesta, sin perderse nada. Incluso los discretos telones laterales están bajo su constante y cuidadosa supervisión.
Una pasión por el escenario, una dedicación a la cultura tradicional y una naturaleza meticulosa –así es como Gu Yuan está pendiente de muchas historias que él coreografía cada año.
Historia y patrimonio sobre el escenario
Desde 2006, Shen Yun se ha convertido en el principal espectáculo de danza y música clásica china del mundo. Cada año, las cuatro (ahora cinco) compañías artísticas de Shen Yun recorren más de 100 ciudades de cuatro continentes. Su misión es presentar la belleza de la China tradicional en todo el planeta.
Mediante la danza clásica china, una orquesta única que combina Oriente y Occidente, miles de accesorios y vestuarios hechos a mano, y fondos digitales de última generación, Shen Yun presenta al público el antiguo reino conocido como la “Tierra de lo divino”.
Mitos, leyendas y registros históricos que recorren las dinastías de China cuentan de seres divinos que bajaron a la Tierra y establecieron la cultura china. Los antiguos chinos atribuían todos los aspectos de su civilización a los Cielos, incluyendo la escritura, la medicina, la vestimenta, la filosofía y, por supuesto, la música y la danza.
Mucho de esto está casi perdido en la China moderna. Mientras, fuera de China y de manera independiente, Shen Yun y sus dedicados artistas como Gu Yuan están reviviendo estos antiguos tesoros.
Con experiencia y corazón
Gu Yuan se graduó de la Academia de Danza de Beijing con una especialización en danza clásica china, y luego se convirtió en un coreógrafo con cientos de obras a su nombre. En 2012, Gu Yuan migró hacia Estados Unidos, donde se unió a Shen Yun.
‘Altamente organizado’, así lo describen quienes han trabajado con Gu Yuan. Se trata de un coreógrafo que conoce los movimientos de cada personaje, el tiempo para cada acción tanto dentro como fuera del escenario, y dónde debe estar cada persona y cada cosa en todo momento. Y de igual modo, espera la máxima precisión por parte de cada bailarín, músico y técnico.
Gu Yuan prefiere presentar cada danza con una historia. “Acérquense…” les dirá aunque tenga poco tiempo para trabajar, porque todos deben entender lo que están representando.
“Ustedes no están simplemente moviéndose al ritmo”, les dice a los bailarines. “Usen su imaginación para que los personajes cobren vida”.
Dando vida a las leyendas
Entre las nuevas danzas que Shen Yun presenta cada año, hay queridos relatos de la historia, la literatura y la mitología. El Rey Mono y el Palacio del Dragón, La Dama de la Luna y Ne Zha agita el mar –obras llenas de acción y con un profundo significado– son algunas de las creaciones de Gu Yuan.
En el último tramo de la época de ensayos para el show 2017, pudimos reunirnos con Gu Yuan y conversar un poco con él.
-¿Qué crees que hace a Shen Yun diferente de los shows que salen de China continental?
GY: Shen Yun tiene su sede fuera de China. Esto ya dice mucho. Significa que no estamos sujetos a la censura del gobierno. En los últimos años, mientras la cultura tradicional está siendo reprimida y deteriorada en China, en el extranjero la celebramos al máximo. Pero somos la única organización artística en hacerlo a tan gran escala.
La misión de Shen Yun es compartir la belleza de la cultura y el arte de China –nuestras historias, leyendas y todo lo que nos han enseñado los 5.000 años de historia– todo mediante la auténtica danza china.
Eso es lo bueno. Por eso fue que cuando escuché de Shen Yun la primera vez, inmediatamente me decidí a venir. Sabía que aquí es donde debía estar.
-¿Puedes explicar un poco sobre la auténtica danza china?
GY: La danza clásica china en realidad es uno de los sistemas de danza más completos del mundo. Durante miles de años ha sido refinada hasta convertirse en un sistema de danza distintivo que encarna la estética tradicional.
Los coreógrafos y artistas aman la danza clásica china por su expresividad. Hay cientos de posturas y movimientos que le son únicos, pero también hay incontables maneras de expandirlos para poder expresarte.
Además, hay una gran variedad de técnicas: saltos, giros y volteretas. Esto hace que las danzas se vean más impresionantes y emocionantes. Pero como coreógrafos, la verdadera razón por la que incorporamos las técnicas es para retratar a nuestros personajes e historias de manera más precisa.
-¿Cuál es tu visión para las coreografías?
GY: Al llegar a Shen Yun me di cuenta de que el tema que quería que atravesara todas mis obras es la conexión entre lo humano y lo divino. En realidad, la creencia tradicional china es que los dioses nos otorgaron nuestra cultura. Ellos establecieron nuestra civilización y nos dieron todo lo que conocemos. Ellos establecieron nuestra forma de vida.
Esto es lo que hace que la cultura china sea tan valiosa. Y también hace que sea una gran lástima que estemos perdiendo el contacto con las tradiciones. Quiero que mis danzas muestren diferentes elementos de la cultura inspirada por los dioses para que estos puedan vivir en los corazones del público.
-Al público le encanta la interacción entre los bailarines de Shen Yun y los efectos especiales en las proyecciones digitales de fondo. ¿Cómo lo hacen posible?
GY: Para que los efectos del telón de fondo funcionen, hace falta una enorme colaboración entre varios departamentos. Diseñadores, técnicos, directores de orquesta, coreógrafos y artistas –todos tienen que trabajar juntos para conseguir un resultado satisfactorio. Es una técnica complicada que tiene que ser planeada al milímetro.
Pero no voy a decir nada más. Eso sería revelar algunos secretos.
-¿Le puedes contar al público qué esperar de Shen Yun 2017?
-GY: No veo la hora de que el público conozca el nuevo espectáculo. Hemos preparado un amplio espectro de historias y danzas de diferentes dinastías y grupos étnicos. Todo está casi perfeccionado para la próxima gira y estoy seguro de que el público no quedará decepcionado.
Vengan preparados para reírse mucho, y quizás para llorar un poquito también. Pasarán una gran noche.