La Pala de la Luna Creciente
El arma elegida por los monjes extraordinarios
¿Qué tienen en común el ex ogro Sha (Viaje al Oeste) y el feroz Monje Flor (Bandidos del Pantano)? Ambos son representados con la misma arma, de aspecto muy curioso. El primero la trajo cuando bajó de los Cielos. La del último pesaba unos impresionantes 36 kilos…
Les presentamos una parte del arsenal monástico: la Pala de Luna Creciente
La Pala de Luna Creciente (月牙鏟, o yuè yá chǎn) es una fusión entre una herramienta de jardinería aplanada y una hoz modificada, y es considerada un arma china del tipo vara. Curiosamente, originalmente era un instrumento para la paz, no para matar. Los monjes viajeros de la antigua China llevaban consigo a su antecesora —la Pala Conveniente (方便鏟, o fāng biàn chǎn)— para cumplir con su responsabilidad monástica de realizar los rituales del entierro para todos los muertos que se encontraban en su recorrido.
Las tres curvas que definen a la Pala representan los Tres Poderes de la cosmología tradicional china (el Cielo, la Tierra y el Hombre) y los Tres Tesoros del Daoísmo (esencia, qi y espíritu). Con el tiempo, en el extremo opuesto se le añadió un filo en forma de luna creciente para apartar por el cuello a los animales depredadores sin matarlos.
Pitura de Lu Zhishen
La versatilidad de la Pala de la Luna Creciente permite a su dueño enganchar, apuñalar, cavar, barrer, golpear y cortar a sus oponentes usando técnicas de estilos de lucha en lanza, vara, espada y tridente. Actualmente, los monjes shaolin y los daoístas son los principales usuarios de este arma.
Y así se volvió el arma elegida por Sha, quien la necesitaba para proteger al Monje Tang en su peligroso viaje, y por Lu Zhishen, quien demostró tener una feroz lealtad hacia su desafortunada banda de hermanos.
24 de agosto de 2016