
Antiguos jardines
Ingrese a un jardín de la antigua China, resguardado y tranquilo. Bajo el cobijo de sus muros encontrará un espacio idílico, un escape a las preocupaciones cotidianas. Rodeado de la belleza de edificios exquisitamente ornamentados y de flores y árboles exóticos, se hallará en paz con la naturaleza. No es casualidad que el jardín esté ordenado según la antigua teoría de que el hombre y la naturaleza deben estar en armonía. Los varios elementos y formas geométricas del jardín—el agua corriendo, las plantas, los pabellones, los puentes de piedra, los poemas grabados en las rocas—están ubicados de una manera profundamente estratificada, y estas ubicaciones contienen un profundo significado. Aquí uno puede perderse en los pensamientos. Aquí el tiempo se hace más lento. ¿Por qué uno querría irse de aquí?